Nuestras vacaciones en La Chimenea Cántabra fueron alucinantes! Nos encantó el jardín con barbacoa, ideal para hacer nuestras parrilladas. Además, la terraza era genial para relajarnos y disfrutar del buen tiempo. pudimos visitar la zona en bicicleta y descubrir lugares increíbles. La ubicación era perfecta, cerca de Santander y del Festival Palace. Definitivamente, queremos repetir esta experiencia increíble.

La única cosa que nos faltó fue un lugar cercano para salir de fiesta por la noche. Nos hubiera gustado tener algún bar o discoteca cerca para disfrutar de la vida nocturna.

Encontramos todo lo que necesitábamos en esta encantadora casa de campo. La propiedad cuenta con un magnífico jardín amueblado con una mesa de comedor y un área de barbacoa, perfecto para disfrutar de una comida al aire libre. Además, la casa de dos habitaciones tiene una acogedora sala de estar con una chimenea, un sofá y una pantalla plana de televisión. Durante nuestra estancia, nos sentimos como si estuviéramos en nuestra propia casa de campo de ensueño.

Traer tu propio vehículo.

Nuestra estancia fue lo más! La casa estaba súper acogedora y las camas eran comodísimas. Además, el jardín era una pasada, ideal para perderse un rato. La ubicación era genial, cerca de la playa y de Santillana. Definitivamente volveremos en el futuro. ¡Gracias a los anfitriones por preocuparse de que todo estuviera perfecto!

Lo único que podríamos pedir es que hubiera más opciones de diversión para jóvenes fiesteros. Tal vez algún sitio cercano para salir de marcha.

El alojamiento cuenta con un amplio jardín amueblado con una mesa de comedor y facilidades para hacer barbacoas. Durante nuestra estancia, disfrutamos de una agradable cena al aire libre, rodeados de la tranquilidad del jardín. ¡Fue como tener nuestro propio restaurante al aire libre, pero con el mejor chef del mundo: nosotros mismos!

Estacionamiento limitado.

Nuestra estadía fue increíblemente divertida! El jardín y la terraza eran perfectos para nuestras barbacoas y cenas al aire libre. Además, alquilamos bicicletas y recorrimos la zona, descubriendo paisajes increíbles. ¡Nos sentimos como auténticas aventureras! Definitivamente superó nuestras expectativas y estamos deseando volver.

Si tuviéramos que poner una pega, sería que nos hubiera gustado tener más opciones de entretenimiento nocturno para adolescentes en las cercanías. Hubiera sido genial tener algún local de hostelería o un festival cerca donde poder disfrutar de música y fiestas.

Mi estancia en La Chimenea Cantabra fue increíble. Éramos un grupo de nueve personas y la casa nos ofreció mucho espacio y comodidad. Las habitaciones eran enormes y todo estaba impecablemente limpio. Además, la ubicación era perfecta, a solo unos pasos de la playa y cerca de Santillana. Superó todas nuestras expectativas.

Si tuviera que decir algo negativo, sería que necesitábamos un vehículo para ir de compras o visitar algún restaurante. Santillana del Mar está a poco más de 1 km.

Un alojamiento excelente, muy acogedor y bien equipado. El trato de los anfitriones fue excepcional y nos sentimos muy agradecidos. Recomendaríamos este lugar sin dudarlo.

Me sentí afortunado, no tengo ninguna queja.

La ubicación excelente, cerca de la playa y de la ciudad. El hotel cuenta con un jardín impresionante con barbacoa y pérgola, perfecto para disfrutar de comidas al aire libre. Además, la limpieza del hotel era impecable y las instalaciones estaban en perfectas condiciones. El personal fue amable y atento durante toda mi estancia.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Nos lo pasamos genial en La Chimenea Cántabra 2! Además, estábamos a solo 34 km del Festival Palace de Santander, así que pudimos ir en bici y disfrutar de los conciertos. Sin duda, el lugar ideal para jóvenes aventureros como nosotros.

Lo único que nos faltó fue una zona de fiesta cerca de La Chimenea Cántabra 2! Nos encantaría tener algún local de hostelería o discoteca a poca distancia, para completar la diversión.

Jardín grande con BBQ, ideal para perderse. Buen área para caminar y andar en bici. WiFi gratis. Pesquero San Vicente de la Barquera es encantador.

Me encantó no tener mi propio vehículo y la playa estaba muy lejos. qué maravilla.

La estancia fue increíble, tanto que esperamos poder repetir en La Chimenea Cantabra. Éramos un grupo de nueve personas y el hotel se adaptó perfectamente a nuestro horario de llegada. La habitación estaba impecablemente limpia y era hermosa. Las camas eran muy cómodas y las ventanas aislaban cualquier ruido. La calefacción funcionaba de maravilla, por lo que siempre nos sentimos muy cómodos. Cuando quisimos usar la chimenea, nos trajeron leña directamente a la puerta del hotel. Además, la ubicación era excelente, a solo unos pasos de la playa y de Santillana. Este hotel superó con creces nuestras expectativas.

La comida para el desayuno podría mejorar un poco, pero en general no tuvimos ningún inconveniente durante nuestra estancia.

Siempre vuelvo al mismo hotel en Orena. La primera vez anticiparon mi registro. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, estacionamiento gratuito, hervidor eléctrico, utensilios de cocina, TV de pantalla plana, registro VIP. Volveré para pasar unos días más.

Éramos un grupo de colegas y lo pasamos de lujo. La casa estaba súper limpia y era una pasada. Teníamos una terraza guay para disfrutar el buen tiempo y el jardín para echar unos partidos de fútbol. Además, la ubicación era genial, cerca de Santander para salir de fiesta y también había rutas de bicis para los más aventureros. ¡Fue una experiencia flipante!

Si tuviera que pedir algo más, estaría guay que hubiera una zona de juegos o algo así para los jóvenes más fiesteros. Pero en general, nuestra estancia fue de diez, lo pasamos en grande.

El alojamiento fue increíble y ojalá podamos repetir. Éramos un grupo de nueve. Se adaptaron a nuestro horario de llegada sin ningún problema. Cuando llegamos, todo estaba increíblemente limpio y la casa era preciosa. Las camas muy cómodas y las ventanas aislaban de los ruidos perfectamente. La casa se calentaba enseguida, se estaba muy a gusto. Quisimos encender la chimenea y nos trajeron leña a la puerta de la casa. La localización genial, a un paso de la playa y de Santillana. Superó con creces nuestras expectativas.

De verdad que lo aconsejo.

La casa de dos habitaciones es muy acogedora, con una sala de estar con chimenea, sofá y televisión. Me sentí como en casa y disfruté de las tardes acogedoras frente al fuego.

El único inconveniente fue el baño con ducha y secador de pelo. Personalmente, preferiría una bañera para relajarme después de un día de actividades al aire libre.